La cría española está de luto

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La cría española sigue languideciendo. A los pésimos resultados de la subasta de ACPSIE y el cierre de la Yeguada Torreduero, se suma ahora la liquidación de la Yeguada Milagro que puso en venta 8 de sus últimas 11 yeguas madre esta semana. El resultado de la subasta, llevada a cabo a través de la plataforma digital Utens fue de 7.252 euros, con una media de 906,50€. Las 8 compras tienen Marruecos como destino final.

«La subasta es la constatación, para quien no quisiera verlo de que la cría en España está absolutamente hundida. No hay ya prácticamente cría comercial. Ha quedado reducida a un residuo mínimo. Es absolutamente deficitaria», advierte Fabian Barreiro, director de la Yeguada Milagro.

El mejor ejemplo de lo que comenta es el caso de Sculpted (Orpen), yegua colocada de Grupo, llena de Caradak, por lo que lleva en su vientre a un propio hermano de United States, mejor tres años nacional en 2021 que recibió la puja más alta, unos 1750€.

Milagro, que durante muchos años ha sido el santo y seña de la cría nacional ha ido languideciendo en los últimos años como reflejan sus nacimientos (32 en 2020, 14 en 2021 y 3 en 2022) pasando su apuesta de futuro por su flamante centro de entrenamiento. «Seguiremos manteniendo una cría en números casi testimoniales que intentaremos que sea de la mayor calidad posible. También haremos alguna operación de recría y mantendremos el centro de entrenamiento porque entendemos que, ahora mismo, es la mejor forma de vender con un margen de beneficio». Morning Beauty (Dawn Approach), Nuns Walk (Sleeping Indian) y Mola a lot (Camelot) serán las tres únicas yeguas madre que mantendrán en sus prados de Navarra.

La subvención del Ministerio de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente se puso en marcha en 2006 con 2.700.000 euros. Un año antes en España nacieron 350 potros. En 2021 la subvención despareció -noticia que en su día adelantamos- y todo hace indicar que en 2022 los nacimientos nacionales no superarán la barrera de 50.

Federico Rioperez, presidente de la Asociación de Criadores de Pura Sangre Inglés de España, defiende sin embargo el resultado de la última subasta y cree que el problema está en el programa y la falta de compradores: «Los resultados de la subasta han sido similares a los del año pasado y superiores a Arqana y Tatersalls por primera vez. El problema no es la cría, sino la ausencia de compradores de yearlings y un programa tremendamente mal diseñado con unas dotaciones a la baja que se han corregido para 2022».